Aumentan las advertencias sobre las consecuencias económicas negativas de una independencia de Cataluña
El aviso más serio vino el lunes de la mano del gobernador del Banco de España, Luis María Linde, al afirmar que “tensiones graves pueden dar lugar a corralitos” y aseguró que una Cataluña independiente saldría de forma “automática” de la Unión Europea y de la zona euro, por lo que “lógicamente no tendría acceso la liquidez que facilita el Banco Central Europeo”.
No obstante, Linde subrayó que la secesión de Cataluña es un “futurible altamente improbable”.
También ese mismo día, el presidente de Telefónica, César Alierta, puso de relieve que “quiero muchísimo a Cataluña y a los catalanes, y lo mejor para los catalanes es seguir en España. Los efectos económicos de una supuesta independencia, que no se va a dar, son súper negativos”.
Además recordó que “en todos los procesos de separación, el flujo comercial baja el 25%. Eso significa que aumenta el paro, baja la recaudación y las pensiones hay que bajarlas. Nadie se quiere apuntar a irse al paro, a que le bajen las pensiones y que baje el gasto público social, la educación, la sanidad y los salarios de los funcionarios” .
CEOE y CEPYME destacan las graves consecuencias
Días atrás, la CEOE y Cepyme emitieron un comunicado conjunto en el que apoyaban las declaraciones efectuadas del presidente de la CEOE, Juan Rosell, y el de la Cámara de Comercio de España y Freixenet, José Luis Bonet, sobre las “muy graves consecuencias para la economía, para las empresas y para el bienestar de los ciudadanos, tanto de Cataluña como del conjunto de España”, si se produjera esta secesión .
En comunicado, ambas organizaciones hacían hincapié en que “las consecuencias de una hipotética secesión de Cataluña del resto de España, de la Unión Europea y del euro serían muy graves para la economía, para las empresas y para el bienestar de los ciudadanos, tanto de Cataluña como del conjunto de España”.
El Círculo de Empresarios también avisó la pasada semana de los gravísimos daños que sufrirían las economías españolas y catalana si este proceso llega a su fin y consideró que la pretensión de los independentistas va en dirección contraria a Europa.
AEB y CECA: las entidades estarían obligadas a reconsiderar su estrategia de implantación
Desde el ámbito de la banca y el sector financiero, la Asociación Española de Banca (AEB) y la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) se pronunciaron en una declaración institucional sobre los riesgos que conllevaría la independencia catalana en la estabilidad financiera de la Comunidad.
En dicha declaración, señalaban que la exclusión de Cataluña de la zona euro, como consecuencia de la ruptura unilateral del marco constitucional vigente, llevaría “a que todas las entidades bancarias con presencia en Cataluña afrontaran graves problemas de inseguridad jurídica” .
Ante esta situación, las dos organizaciones afirmaban que como consecuencia de estas dificultades las entidades estarían obligadas a reconsiderar su estrategia de implantación, con el consiguiente riesgo de reducción de la oferta bancaria y, con ello, de exclusión financiera y encarecimiento y escasez del crédito.
Oposición de UGT y CCOO
Desde los sindicatos, también el lunes, tanto el secretario general de UGT, Cándido Méndez, como el de Comisiones Obreras, Ignacio Fernández Toxo, que coincidieron en un acto, mostraron su oposición a un posible proceso independentista.
El máximo líder de UGT destacó que la organización no es partidaria de una posible secesión, aunque defendió la necesidad de abordar “una reforma de la Constitución española” para que resuelva el déficit de participación democrática de la ciudadanía.
Méndez también consideró que la sobreutilización de declaración de líderes internacional y de entidades financieras en contra de la independencia puede tener “un efecto rebote”.
Por su parte, Toxo rechazó la idea de la segregación de una parte del Estado.
“No veo la ventaja la ventaja asociada a la independencia” y remarcó que “la ruptura del país, la segregación de una parte del Estado no favorece a los trabajadores ni a la sociedad catalana ni española”, aunque también defendió una reforma constitucional que permita “un nuevo encaje territorial de Estado”.
En cambio UGT y CCOO de Cataluña se desmarcaron poco tiempo después de Méndez y Toxo y defendieron el derecho a decidir de los catalanes.
En un comunicado, CCOO de Cataluña, que lidera Joan Carles Gallego, recordaba que el sindicato es “una confederación con unos estatutos propios y con voz propia” y que su compromiso con el derecho a decidir de los catalanes es “total”.
Por su parte, UGT de Cataluña reivindicaba en un manifiesto su “posición soberana” y ponía de relieve que “Cataluña ha de ser lo que decidan libremente sus ciudadanos. El derecho a decidir se ha constituido como un derecho de primera magnitud. Ni renunciable ni negociable”.
El presidente de Pronovias, Alberto Palatchi, ha advertido de la posible salida de Cataluña de su empresas si triunfa la independencia
En el mundo de la empresa, el presidente de la cadena de moda nupcial Pronovias, Alberto Palatchi, ha enviado un comunicado a sus trabajadores avisando de que la compañía sería “difícilmente viable” en una Cataluña independiente y de que podría verse obligada a irse del territorio si se produce una secesión.
En el comunicado asegura que tiene la responsabilidad de posicionarse” ante una situación que puede poner en riesgo el futuro de la empresa, pues una Ctaluña independiente quedaría fuera de la UE y de la zona euro y aislada en materia económica, política y de seguridad.
Pronovias cuenta con una plantilla de 1.200 empleados de los que 280 aproximadamente trabajan en la sede del Prat de Llobregat.
Por su parte, el presidente de la farmacéutica Almirall, Jorge Gallardo, difundió la pasada semana un vídeo en la intranet de la compañía avisando de las “consecuencias negativas” que una declaración unilatreal de independencia tendrá para su grupo.
“Nos jugamos el pan”
Empresarios de Cataluña, que engloba a pymes de la Comunidad Autónoma, por su parte, presenta este martes en el que pequeños empresarios, emprendedores y autónomos dirán no a la sececión bajo el lema “Nos jugamos el pan”.
Todas estas advertencias se unen a las que ya hicieron previamente empresarios como el fallecido presidente del Grupo Planeta, José Manuel Lara Bosch, quien mostró en numerosas ocasiones su rechazo al proceso independentista e incluso llegó a amenazar con trasladar su compañía ante una hipotética secesión.
También se ha expresado con dureza en los últimos meses sobre esta cuestión el presidente de Freixenet, Josep Lluis Bonet, al señalar que esa posible independencia sería “un desastre para Cataluña, España y Europa“.
Desde Bankinter, su consejera delegada, María Dolores Dancausa, ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad este martes y ha señalado que “a medida que se acercan las elecciones (catalanas y generales) se genera una lógica incertidumbre de que se pueda cambiar bruscamente lo alcanzado en los últimos años”. “Los inversores están más intranquilos y hay muchos proyectos empresariales estén parados a la espera de que se despeje el horizonte”.
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Fuente: Agencia EFE Empresas
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